18.7.07

Que venga Dios del cielo y que nos coja confesados

Bautista Soler (padre) sabe de lo que habla después de más de 50 años dedicado al ladrillo, y en una entrevista para El Boletín suelta esta perla, entre otras:

-Entonces, ¿prevé una caída de precios de la vivienda?
-Por supuesto. Caerá cerca de un 30% en los próximos años. No hay que perder de vista que la demanda no está respondiendo.
-¿Cómo propone afrontar esta situación?
-Que venga Dios del cielo y que nos coja confesados.


Alto y claro. No habla de los excesos que se están cometiendo con la vivienda, por supuesto, pero, cruel pero cierto, nos da una esperanza a los que no hemos querido entrar en el AVE ladrillero, no hacer el juego a unos cuantos especuladores y nuevos ricos y no aceptar las invitaciones de consejeros que nos decían que lo mejor era tirarse de un puente con una bombona de butano al cuello porque ellos sí lo han hecho. Ahora sólo falta que sea cierto.

Lo que no puede ser es que lo único que haya conseguido ver en el último año a un precio razonable (es decir, menos de 200.000 euros, pero no mucho menos) sean construcciones ilegales (lo último, 70m2 con 35 escriturados, los 35 restantes son paredes y techos que han ido creciendo en una terraza) o que simplemente no existan sobre el papel (compras una duocentésima parte de una parcela para aparcar tu inexistente caravana y de regalo te llevas una casa hecha en fines de semana por algún aficionado al bricolaje).

Pues eso, que a ver si hay suerte y Dios no les coge confesados.